En esta entrada del post de hoy queremos presentamos los tapones que utilizamos para para embotellar nuestros caldos. Estos son naturales y provienen del patrimonio natural de la Sierra de Espadán.
La incorporación del tapón de corcho suele ser lo más habitual para taponar una botella de vino. Sin embargo, para vinos que se van a consumir jóvenes se suele utilizar a menudo la cápsula de aluminio ( ej: algunos vinos jerezanos ). La hermeticidad del tapón queda asegurada por la acción y efecto de aplastar, sobre el borde del gollete, una arandela o disco suave, neutro, impermeable, inatacable por el vino, al menos en periodos breves de tiempo, por eso no es fiable este método para vinos de crianza.
Nuestros proveedores contribuyen al mantenimiento y a la sostenibilidad de este patrimonio. ¿Os gusta?
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